2013
Tal i com us vam dir, ja tenim a punt la segona entrevista del cicle que vam idear. En aquesta hem volgut parlar de la immmigració amb una dona que va venir a Barcelona a buscar feina. La Dulce va decidir abandonar República Dominicana buscant una millor qualitat de vida. Aquí teniu el resultat d'una testimoni que sempre ha lluitat per trobar feina i per mantenir als seus fills. Abans de deixar-vos amb l'entrevista volem agrair a la Dulce que ens hagi volgut concedir aquesta entrevista i transmetre-li que estem contents que hagi aconseguit, malgrat tot, no deixar mai de lluitar per la igualtat de gèneres. Comencem!
Quant temps fa que treballes a Sarrià?
Estoy en Barcelona des del año 1992.
Per què vas venir a viure a Barcelona?
Mis hermanas ya estaban en Barcelona y fueron ellas quienes me ayudaron a venir. La decisión fue difícil. Sabía que no sería fácil pero quería venir a Barcelona para tener más oportunidades y, principalmente, lo hice por mis hijos ya que quería darles mejores condiciones de vida y más recursos en su día a día.
Vas notar molta diferència entre els drets que tenies al teu país d’origen i els que vas adquirir quan vas venir a Catalunya? I les oportunitats?
Mi marido, en mi país, no me dejaba trabajar. Tenía que estar cuidando los niños y quedarme en casa trabajando para la família. Entonces decidí venir a Barcelona para trabajar y sacar adelante a mi familia. En República Dominicana vivíamos bien pero tenía la necesidad de trabajar y vivir en otro lugar. Los derechos de las mujeres, en Barcelona, son mejores. Se las respeta como tales y eso permite que haya más igualdad entre géneros. En cambio, en mi país, los hombres no te dejan trabajar. Las mujeres tenemos que quedarnos en casa para hacer las tareas del hogar y cuidar a los niños. Aunque, de todas formas, las familias más pobres deben trabajar en casa y fuera para vivir. Las primeras entrevistas de trabajo que tuve fueron muy difíciles. La gente me miraba y me trataba diferente por el simple hecho de no ser de aquí. Entonces, después de unos meses de llegar, encontré una familia que me acogió fantásticamente. Y des de entonces que trabajo con ellos y ya llevo casi 20 años!
Quines dificultats vas tenir per trobar feina?
En ese momento había más racismo que ahora. Me miraban por encima y me rechazaban porque era imigrante. Se pensaban que era diferente a ellos e inferior. Eso me dolía mucho y me deprimí. No sabía dónde dejarme caer y, además, tenía miedo de haberme equivocado porque en mi país vivía bien aunque encerrada en casa. Aquí, nadie me tendió la mano para ayudarme, fueron unos meses muy difíciles. Por suerte, seguí luchando para encontrar trabajo y, sobretodo, encontrar uno dónde me trataran igual, sin diferencias de color ni de género. Gracias a dios lo encontré y ahora estoy muy, muy feliz!
Creus que ser dona i immigrant va dificultar la teva recerca laboral?
Sí. Por dos razones muy simples, des de mi punto de vista. La primera es porque, al ser inmigrante, te pasaran por delante los que son del país. La segunda, porque el color de la piel, en los sitios que fui a pedir trabajo, me rechazaron porque no era blanca. Eso me dolía mucho. En mi país no tenía problemas de color pero si por ser mujer. En cambio, al venirme a Barcelona, pensé que todo eso cambiaria, pero no fue así; el color de piel – insisto que fueron los sitios dónde yo fui a buscar trabajo- no me querían y, en cambio, por el hecho de ser mujer aquí la situación era mucho mejor, aunque, de todas formas, no existía ni existe igualdad alguna.
Finalment, com t'imagines la situació de la dona quan assolim l'Estat Propi?
Espero que tengamos muchas oportunidades iguales para todos. Que la juventud de ahora, mujeres, estudien, trabajen, sean fuertes, valientes y que cambien muchas cosas para conseguir la igualdad entre géneros. Ahora, a mí, me toca descansar puesto que he conseguido lo que he querido, estoy trabajando en dos casas dónde me siento muy respetada y, sobretodo, feliz.
